Buscar este blog

jueves, 1 de marzo de 2012

César Azabache Caracciolo.

“La Corte no puede ordenar que se procese a comandos”

Cuestiona. Azabache afirma que la mejor defensa de los comandos depende de una revisión seria de las evidencias.
Cuestiona. Azabache afirma que la mejor defensa de los comandos depende de una revisión seria de las evidencias.
Ex procurador anticorrupción y ex agente del Estado peruano ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Ana Núñez.
Ha dicho que la inocencia de los comandos Chavín de Huántar se puede probar sin ocultar hechos. ¿Qué es lo que no se debe ocultar?
Lo que ocurre es que hay varias cosas que explicar. La primera, que una contienda de competencia a favor de la jurisdicción militar –como la que le entregó la Corte Suprema de Justicia en agosto de 2002 para que conozca una parte del caso en discusión– implica entrar en un terreno que es harto complejo en el Sistema Interamericano...  
Porque vulnera la Convención Americana...
Digamos que si hay algún punto sobre procedimientos judiciales que la Corte Interamericana tiene en claro es que la justicia militar no debe entrometerse cuando está en discusión una cuestión que afecta los derechos humanos. 
Y por eso usted señala que el primer error fue mandar el tema a los tribunales militares...
Sí, pero lo afirmo por una razón: si la justicia militar pide competencia es porque tiene algo ilícito que discutir. Si dejamos las formas, vemos los hechos y las evidencias, que es lo más importante en un caso legal, encontramos que el error proviene de haber pretendido que había algo ilegal que discutir contra los comandos. Las evidencias indican que fue un error denunciarlos en mayo de 2002. También que fue un error incluir en la lista de víctimas a dos de los terroristas abatidos: Luz Meléndez Cueva y Víctor Peceros Pedraza, quienes no murieron en ninguna circunstancia distinta al enfrentamiento que se produjo para rescatar a los rehenes. 
La justicia ordinaria ha determinado que solo Eduardo Cruz Sánchez, "Tito", habría sido abatido después de rendido...
La manera correcta de decirlo es que las evidencias demuestran que el único caso que merece un procedimiento judicial-penal es el que se refiere al deceso de Cruz Sánchez. A partir de esas evidencias podemos decir lo siguiente: más allá de las formas, lo que la Corte Suprema de Justicia hizo el 2002 fue separar del procedimiento a aquellas personas que no estaban involucradas en el deceso de Cruz Sánchez, o sea, los comandos Chavín de Huántar.
¿Debe el Estado peruano aceptar, entonces, que hubo una ejecución (la de Cruz Sánchez) y que los responsables serían los llamados "gallinazos"?
Yo diría que se tiene que admitir que hay un hecho que merece un procedimiento judicial, y tanto lo merece que no hemos podido cerrarlo en diez años, porque el caso de Cruz Sánchez tampoco es sencillo.
Ok, hay un caso que merece ser investigado...
...Y hay un grupo de personas cuya responsabilidad debe establecer un tribunal...
¿Y ese grupo es el de los llamados "gallinazos"...?
Son cuatro personas: Hermoza Ríos, Montesinos Torres, Huamán Azcurra y Zamudio Aliaga. Zamudio está prófugo hace 10 años, de modo que su versión de la historia no la conocemos. Ahora, no es cierto que el caso ante la Corte Interamericana dependa de alguna manera de que el tribunal nacional condene o absuelva a alguien. Depende de que este haga una revisión seria y sostenible en términos internacionales de las evidencias del caso y tome una conclusión responsable.
¿Es correcto o es exagerado decir que los comandos pueden ir al banquillo a partir de un posible fallo de la Corte?
Lo que digo es que la mejor defensa posible de los comandos depende de una revisión seria de las evidencias, porque estas dan una línea de descripción de las cosas que forma un bloque inamovible. Si no hay evidencia que justifique un caso penal contra los comandos, ninguna decisión de ningún órgano, local o internacional, va a desembocar en un procedimiento en su contra.
¿No puede o no debe?
No, no, no, es que no es posible. La Corte no puede ordenar que se procese a los comandos aunque no haya evidencia en su contra. Si podemos plantear un discurso serio sobre las evidencias del caso, lo peor que la Corte podría decir es "que un juez peruano me diga si hay o no evidencias", y cualquier juez de nuestro medio, sin necesidad de ninguna presión política y con completa independencia, puede determinar que, en efecto, nunca hubo nada que investigar contra los comandos.
No hay nada que los involucre.
Desde la diferencia del arma descrita por los peritos hasta que no estuvieron en la zona del deceso ni fueron quienes lo capturaron o recibieron. Entonces, creo que corresponde revisar la evidencia colectivamente, formarnos una convicción seria sobre la misma y concluir en voz alta que la evidencia presente en agosto del 2002, cuando se decidió separar a los comandos del caso, alcanzaba incluso para que la Corte Suprema en lugar de darle competencia a la justicia militar declarara que la decisión de incluir a los comandos en el caso había sido un error. Y es más, que sea el Tribunal Constitucional el que declare que ellos nunca debieron ser incluidos en el proceso.
Adicionalmente, ha dicho que la CIDH demandó a Perú de forma extemporánea...
Sí y hay un antecedente ganado por el Perú, que es el caso Cayara, en el que la Corte declaró que sean cuales sean los hechos de fondo, la Comisión había presentado su caso prácticamente un año después de la fecha en que informó al Estado peruano de su conclusión.
Cuando el plazo es de tres meses.
Así es, y la Corte ya ha declarado que ese plazo es culminante. Por eso creo que el señor Cateriano (nuevo agente ante la Corte) debe estudiar la posibilidad de presentar una excepción por violación del plazo establecido para que la Comisión presente el caso.

Identifican y buscan a 22 terroristas que siguieron hasta el último a “Artemio”

Son fuga. Gran parte de los elementos que conformaron la última columna terrorista de
Son fuga. Gran parte de los elementos que conformaron la última columna terrorista de "Artemio" ya fueron identificados, pero hay otros a los que se les conoce solamente por el apelativo.
Entre los prófugos está Daniel Atencia Beraún, "camarada Leo", del mando militar de la agrupación terrorista que huyó con una mochila repleta de dólares que pertenecía a su jefe, Florindo Flores Hala. Doris Aguirre.
Una verdadera cacería despliegan las fuerzas del orden en los departamentos de Huánuco, San Martín y Ucayali para atrapar a 22 miembros de la última columna terrorista que encabezó Florindo Flores Hala, "camarada Artemio".
Los subversivos han sido plenamente identificados por los senderistas Víctor Ramírez Ordóñez, camarada "Lander", y Teófilo Trujillo Huarauya, "camarada Cubillas", detenidos pocos días antes que "Artemio". Ambos eran parte de la agrupación que acompañó al líder terrorista hasta que fue arrestado.
"Lander" y "Cubillas" proporcionaron a las autoridades detalles de la identificación de los elementos que se dieron a la fuga cuando Florindo Flores resultó intervenido por las fuerzas de seguridad.
A los datos proporcionados por "Lander" y "Cubillas" se suma la información que entregaron cuatro "topos" de la Policía Nacional infiltrados en la última columna de "Artemio", entre ellos el que le disparó.
PISANDO TALONES
Por medidas de seguridad, ellos utilizan las falsas identidades de Eric Caprio Luna, Lander Rodríguez Lima, Santiago López Cuadra y Sebastián Lingán Rodas. A este último se le atribuye haber pegado un tiro en la mano a Florindo Flores Hala.
Entre los 22 terroristas buscados intensamente por las fuerzas del orden, se encuentra Daniel Atencia Beraún, "camarada Leo", de 28 años, mando militar senderista que radicaba en la zona denominada Buenos Aires, en el valle de Yanajanca. A "Leo" se le atribuye haber huido con una mochila con miles de dólares que pertenecía a "Artemio".
El segundo subversivo de relevancia es Toribio Atanacio Quito, "camarada Chavinillo", miembro del equipo de seguridad de "Artemio" en la noche que fue atacado. A "Chavinillo" se le han detectado comunicaciones radiales con sus cómplices para intentar reagruparse.
Walter Díaz Vega, "camarada Percy", se desempeñó como mando militar de “Artemio”. Es violento y peligroso. Está armado con fusil Galil, y por eso es uno de los más buscados, al igual que Agustín Atencia Bardales, "camarada Eder", sindicado como hombre de confianza de “Artemio”. Coordinaba con las autoridades de la zona del Huallaga.
HASTA EL ÚLTIMO
En el caso de Alberto Tapullima Isuiza, "camarada Elías", dirigió uno de los pelotones de 15 hombres de la banda de Florindo Flores. Se sospecha que trate de montar un grupo con los elementos terroristas dispersos.
A estos se suma Juan Tarazona Evaristo, "camarada Alonso", un experimentado terrorista que formaba parte del círculo de confianbza de "Artemio".
Silver Bautista Olivares, "camarada Pajarito", quien se encargaba de las acciones de inteligencia de la agrupación terrorista, e Ítalo Gutiérrez Pisco, "camarada Rubén", que era parte del equipo de seguridad de Florindo Flores, son los terroristas cuya captura es de carácter urgente.
Jhin Orneta Almico, "camarada John"; Nelwar Trujillano Vásquez, "camarada Marvin"; y Maycol Tineo Soto, "camarada Denis", han sido identificados como parte del cogollo que iba a todas partes con "Artemio", y que a raíz de la captura de este, han huido despavoridos.
La búsqueda es aire, tierra y río, casa por casa.
TERRORISTAS BUSCADOS
Son los que integraron la última columna de "Artemio", o colaboraban con la organización, entre ellos los narcotraficantes Rafael Pinedo y Walter Calderón.
Agustín Atencia B. Daniel Atencia B. Toribio Atanacio Q. Tiburcio Gonzales S.
Lener Maldonado V. Mariano Pérez S. Ítalo Gutiérrez P. Jhim Orneta Alminco
Juan Carlos Tarazona E. Nelwar Trujillano V. Jack Rider Marín Gómez.
Alberto Tapullima I. Silver Jhoan Bautista O. Walter Díaz Vega. Rafael Pinedo V.
Walter Calderón M. Antonio Meza Pulgar. Alezander Fabián H. Margarita Hilario G.
Gil Orneta Cobos. Mayco Tineo Soto. Cuarto Chujandama. 

El Perú y Ecuador harán acciones conjuntas contra el narcotráfico y la minería ilegal

En el Gabinete Binacional, el ministro de Defensa peruano estimó que la frontera norte quedará libre de minas el 2017
Miércoles 29 de febrero de 2012 - 07:04 pm
Rafael Correa
(Foto Reuters)
El ministro de Defensa, Alberto Otárola, estimó hoy que en el 2016 la frontera entre el Perú y Ecuador quedará libre de minas antipersonales. Fue al realizar un balance de las labores de desminado humanitario en la frontera común, a cargo de las Fuerzas Armadas de ambas naciones.
“Creo que en el 2016 o 2017 podremos decir que nuestras fronteras estarán libres de minas, como deben estar todas las fronteras de los países democráticos que respetan el derecho a la vida de sus ciudadanos”, afirmó.
Otárola destacó que el 2011 se retiró 1.495 minas, diez veces más de lo que se logró en el 2010 y dijo que el próximo 30 de abril concluirá la entrega de información sobre áreas peligrosas minadas en la zona de frontera común.
También mencionó que Ecuador y el Perú habían planteado terminar el desminado completo de nuestras fronteras en el año 2034, pero que ese plazo se acortó.
OPERACIONES CONJUNTAS
El titular del sector informó que ambos países combatirán el narcotráfico, la tala ilegal, la minería informal, el contrabando de combustible y de insumos químicos.
En ese sentido, adelantó que este año las Fuerzas Armadas y las Policías Nacionales de ambos países realizarán operaciones trimestrales contra estos delitos.
Señaló también sobre la construcción de 27 hitos en la región amazónica para el mantenimiento de los límites terrestres entre el Perú y Ecuador, y anunció que se proyecta construir otros 15 hitos en la cordillera del Cóndor.
GASTOS MILITARES
Otárola indicó que se ha firmado un compromiso de medición de gastos militares entre el Perú y Ecuador. “Cada país sabe, por motivos de transparencia y confianza mutua, cuánto está gastando la contraparte en materia militar”, explicó en declaraciones recogidas por Andina.
Otárola expuso hoy los avances en materia de defensa y seguridad y confianza mutua, en el Encuentro Presidencial y V Gabinete Binacional Perú y Ecuador, celebrado en Chiclayo.