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miércoles, 27 de junio de 2012


¡Narcoterrorista ‘Gabriel´ celebró fiesta de San Juan durante cinco horas!

¡Narcoterrorista ‘Gabriel´ celebró fiesta de San Juan durante cinco horas!
Cada 24 de junio la selva peruana se paraliza en su totalidad. Sin ninguna excepción, todos celebran la fiesta de San Juan. Salen de sus hogares y se dirigen a los ríos, en cuyas playas bailan y beben cerveza. El domingo último, el líder del autodenominado ‘Ejército Militarizado del Partido Comunista del Perú’ Martín Quispe Palomino, (a) camarada ‘Gabriel’, tuvo la osadía y la desfachatez de ingresar, junto a su columna de narcoterroristas, a la comunidad de Limatambo ubicada en la inexpugnable selva del Vilcabamba, en Cusco, para festejar a lo grande.

’Gabriel’ ingresó a las 4 de la tarde y se retiró a las 9.30 de la noche con unos 30 a 40 hombres fuertemente armados. Dio un discurso a unos 350 pobladores en el proscenio oficial y bailó casi toda la noche”, confirma Pedro Yaranga, experto en temas de narcoterrorismo.

Lo increíble de esta nueva incursión narcoterrorista es que ‘Gabriel’ utilizó el escenario principal para hacer proselitismo durante aproximadamente 25 minutos. Lanzó arengas a favor de su ‘guerra popular’, que los lugareños tuvieron que escuchar en silencio por temor a represalias. Luego tuvo el descaro de quedarse a bailar junto a los pobladores, bajo un cerco de seguridad que resguardaba el lugar. Todo ello, a pesar de existir una base contrasubversiva del Ejército Peruano a solo 10 minutos del lugar, en el pueblo de Villa Virgen, a dos horas de Kimbiri.

“Este hecho es espectacular en cuanto se evidencia una vez más que no existe el servicio de inteligencia en la zona. No hay reacción de las fuerzas armadas y policiales. ‘Gabriel’ estuvo en este lugar por lo menos cinco horas, incluso se quedó a bailar con las mujeres”, lamentó Yaranga. Pero eso no es todo, el tercero de los hermanos Quispe Palomino ingresó por segunda vez a la misma localidad al mediodía del día siguiente, lunes, sin que nadie diga absolutamente nada. Los militares y la policía ni enterados de esta nueva incursión. Precisamente el camarada ‘Gabriel’ lideró el secuestro de 36 trabajadores de Camisea y fue el autor de la muerte de 9 valerosos miembros de nuestras fuerzas armadas.

ERIC PEREIRA - UNIDAD DE INVESTIGACIÓN: epereira@diario16.com.pe

Fue sesgado el informe pericial de Baraybar

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La existencia de un sesgo ideológico en el informe elaborado por los peritos Clyde Snow y José Pablo Baraybar, para el caso de la presunta ejecución extrajudicial del emerretista Eduardo Cruz, alias ‘Tito’, fue puesto de manifiesto por el procurador del Ministerio de Defensa, Gustavo Adrianzén, quien hizo público un texto elaborado por Baraybar en donde este deja sentado su punto de vista al respecto.
Adrianzén se remitió a la versión en inglés del libro “Traumatismos óseos”, en donde –además de señalar que el evento que tuvo lugar el 22 de abril de 1997 fue un “tiroteo”– el director del Equipo Peruano de Antropología Forense afirma la posibilidad de una ejecución extrajudicial, hipótesis en que se basa la acusación de la ONG Asociación Pro Derechos Humanos (Aprodeh) contra el Estado Peruano ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
“En las conclusiones de este documento (el libro de Baraybar, del año 2008), solo que en lengua inglesa –lo que se vende en el extranjero–, el señor dice con absoluta claridad: ‘examinando los disparos en los cráneos, podemos afirmar que las víctimas fueron ejecutadas extrajudicialmente’. No una, ‘las’ víctimas”, dijo para Canal N.
Continuó el jurista señalando que, a diferencia de esta edición, la versión en español de dicho texto –publicada el año 2011– ya no hace mención a tales ejecuciones.

Gobierno inicia nueva etapa de intervención en el VRAE

Cierre. Carmen Masías, el premier Valdés y el canciller Rafael Roncagliolo en la final de la cumbre antidrogas.
Cierre. Carmen Masías, el premier Valdés y el canciller Rafael Roncagliolo en la final de la cumbre antidrogas.
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Hoy en Pichari. Premier Óscar Valdés explicó que combatirán al narcotráfico aplicando cuatro ejes temáticos, basados no solo con tácticas militares y policiales.
Consuelo Alonzo/
El Perú dará inicio hoy a una nueva etapa de lucha contra el narcotráfico en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), anunció ayer el presidente del Consejo de Ministros, Óscar Valdés, durante su discurso de clausura en la Conferencia Internacional Antidrogas.
Tras reconocer que el Perú es consciente del problema que vive y de la lucha frontal que tiene que hacer contra el tráfico ilícito y la tarea que debe realizar por erradicar las hojas de coca, explicó que ahora combatirán este flagelo no solo con la interdicción sino llevando el desarrollo alternativo y acercando el Estado a todas las poblaciones.  
Para ello, agregó, aplicarán cuatro ejes temáticos de intervención. El primero –dijo– consiste en luchar contra la pobreza, y para ello involucrarán a la empresa privada; mientras que un segundo eje buscará luchar contra la desigualdad social, llevando conectividad, fibra óptica, electricidad, telecomunicaciones, educación y salud a todas las zonas donde hagan falta.
Un tercer eje se enfrentará contra el terrorismo y sus remanentes; y finalmente, un cuarto combatirá al narcotráfico y al crimen organizado, para lo cual no descuidará el lavado de activos provenientes del narcotráfico.
El Premier, quien presentará esta nueva etapa en Pichari (Cusco), reveló que quien estará a cargo de la ejecución de este programa será Luis Rojas Merino, actual secretario ejecutivo del Grupo Multisectorial del VRAEM, con rango de ministro por la tarea que ejercerá.
"Rojas Merino será un gran coordinador. Va a supervisar que todos los ministerios avancen y que tengan una estrecha relación con las fuerzas militares. Será un comisionado que responderá al Primer Ministro", detalló Valdés.
Cabe indicar que en el VRAEM, según datos del INEI, la pobreza es del 65% de la población, que representa el doble del promedio nacional, y la extrema pobreza es de 26,6%, que viene a ser tres veces el promedio nacional.
Declaración de Lima
En tanto, al término de la conferencia, los jefes de las delegaciones suscribieron la Declaración de Lima, en la que, entre otros puntos, se comprometieron en seguir fortaleciendo la cooperación internacional para identificar, embargar preventivamente e incautar bienes relacionados con las drogas.
 Hojas de coca  en cocaína
 La presidenta de DeVida, Carmen Masías; el embajador de Francia, Jean Jacques Beaussou; y el representante de Naciones Unidas contra las Drogas para Perú y Ecuador, Flavio Mirella, firmaron el convenio "Factores de conversión de Hoja de Coca en Cocaína en el Perú". Un estudio que permitirá conocer los volúmenes de hojas de coca e insumos químicos que se emplean para obtener la droga.  
Mirella dijo que en agosto presentarán las nuevas cifras de las hectáreas cultivadas de hoja de coca en Perú y Bolivia durante el 2011.
http://www.unodc.org/documents/data-and-analysis/WDR2012/Executive_summary_spanish.pdf

2012 RESUMEN EJECUTIVO 
INFORME MUNDIAL SOBRE LAS DROGAS 2012 
RESUMEN EJECUTIVO 
INFORME MUNDIAL SOBRE LAS DROGAS 

trarrestados por un auge de la producción de drogas sin-
téticas, incluido el aumento considerable de la producción 
y el consumo de sustancias psicoactivas no sujetas a fiscali-
zación internacional. 
Aunque cabe elogiar a los Estados Miembros por sus deno-
dados esfuerzos para combatir el problema de la droga, 
frecuentemente con apoyo de la UNODC, las cifras esbo-
zadas en los párrafos precedentes muestran la magnitud 
del desafío que tienen ante sí. La respuesta de la UNODC 
ha consistido en una labor dual: en primer lugar, elaborar 
un enfoque integrado; y en segundo lugar, centrar la aten-
ción en la prevención, el tratamiento, el desarrollo alterna-
tivo y la promoción de los derechos humanos 
fundamentales. 
Elaboración de un enfoque integrado 
Las corrientes del tráfico de drogas tienen dimensiones 
mundiales. Vinculan a regiones y continentes, a veces con 
consecuencias dramáticas para los países afectados. Nues-
tras actividades de investigación y análisis de tendencias 
tienen por objeto mejorar la comprensión de esas cues-
tiones. Sus resultados se aprovechan en la formulación de 
programas integrados para reducir la oferta y la demanda 
de drogas ilícitas. 
La UNODC está creando programas regionales integrados 
a la vez que promueve las respuestas interregionales e inter-
institucionales. Una de esas iniciativas interinstitucionales 
región, que se ha reforzado, se vinculará con dicho centro. 
Se están creando centros de excelencia en la República 
Dominicana y México para promover la reducción de la 
demanda de drogas. 
En Centroamérica, una red de fiscales está aplicando prác-
ticas óptimas para fortalecer la justicia penal en esa región. 
Al mismo tiempo, el Programa mundial de fiscalización 
de contenedores, cuya finalidad es fiscalizar los contene-
dores transportados por mar y por aire, se está ampliando 
y funciona en un mayor número de países. En el África 
occidental y central se están logrando progresos gracias a 
la creación de dependencias de lucha contra la delincuencia 
transnacional. 
En el Asia sudoriental, la UNODC proporciona la 
estructura de base para la cooperación transfronteriza entre 
los países de la subregión del Gran Mekong, ayuda a esta-
blecer sistemas de subsistencia sostenibles mediante planes 
de desarrollo alternativo y ofrece a los países una base 
empírica para la adopción de medidas contra la amenaza 
conjunta de la delincuencia organizada y el tráfico de 
drogas. 
Además, la UNODC contribuye a mejorar la capacidad de 
lucha contra el blanqueo de dinero y la corrupción en todas 
las regiones mediante la interrupción de la corriente del 
producto de las drogas ilícitas, que las redes de la delincuen-
cia utilizan para multiplicar sus actividades delictivas. 
trarrestados por un auge de la producción de drogas sin-
téticas, incluido el aumento considerable de la producción 
y el consumo de sustancias psicoactivas no sujetas a fiscali-
zación internacional. 
Aunque cabe elogiar a los Estados Miembros por sus deno-
dados esfuerzos para combatir el problema de la droga, 
frecuentemente con apoyo de la UNODC, las cifras esbo-
zadas en los párrafos precedentes muestran la magnitud 
del desafío que tienen ante sí. La respuesta de la UNODC 
ha consistido en una labor dual: en primer lugar, elaborar 
un enfoque integrado; y en segundo lugar, centrar la aten-
ción en la prevención, el tratamiento, el desarrollo alterna-
tivo y la promoción de los derechos humanos 
fundamentales. 
Elaboración de un enfoque integrado 
Las corrientes del tráfico de drogas tienen dimensiones 
mundiales. Vinculan a regiones y continentes, a veces con 
consecuencias dramáticas para los países afectados. Nues-
tras actividades de investigación y análisis de tendencias 
tienen por objeto mejorar la comprensión de esas cues-
tiones. Sus resultados se aprovechan en la formulación de 
programas integrados para reducir la oferta y la demanda 
de drogas ilícitas. 
La UNODC está creando programas regionales integrados 
a la vez que promueve las respuestas interregionales e inter-
institucionales. Una de esas iniciativas interinstitucionales 
región, que se ha reforzado, se vinculará con dicho centro. 
Se están creando centros de excelencia en la República 
Dominicana y México para promover la reducción de la 
demanda de drogas. 
En Centroamérica, una red de fiscales está aplicando prác-
ticas óptimas para fortalecer la justicia penal en esa región. 
Al mismo tiempo, el Programa mundial de fiscalización 
de contenedores, cuya finalidad es fiscalizar los contene-
dores transportados por mar y por aire, se está ampliando 
y funciona en un mayor número de países. En el África 
occidental y central se están logrando progresos gracias a 
la creación de dependencias de lucha contra la delincuencia 
transnacional. 
En el Asia sudoriental, la UNODC proporciona la 
estructura de base para la cooperación transfronteriza entre 
los países de la subregión del Gran Mekong, ayuda a esta-
blecer sistemas de subsistencia sostenibles mediante planes 
de desarrollo alternativo y ofrece a los países una base 
empírica para la adopción de medidas contra la amenaza 
conjunta de la delincuencia organizada y el tráfico de 
drogas. 
Además, la UNODC contribuye a mejorar la capacidad de 
lucha contra el blanqueo de dinero y la corrupción en todas 
las regiones mediante la interrupción de la corriente del 
producto de las drogas ilícitas, que las redes de la delincuen-
cia utilizan para multiplicar sus actividades delictivas. 
PREFACIO 
INFORME 


Se calcula que unos 230 millones de personas, o el 5% de 
la población adulta del mundo, consumieron alguna droga 
ilícita por lo menos una vez en 2010. Los consumidores 
problemáticos de drogas suman unos 27 millones, o el 
0,6% de la población adulta mundial. En general, el uso 
de drogas ilícitas parece haberse estabilizado en todo el 
mundo, aunque continúa aumentando en varios países en 
desarrollo. La heroína, la cocaína y otras drogas se cobran 
la vida de aproximadamente 0,2 millones de personas cada 
año, siembran devastación en las familias y causan sufrimiento 
a miles de otras personas. Las drogas ilícitas socavan 
el desarrollo económico y social y fomentan la delincuencia, 
la inestabilidad, la inseguridad y la propagación del VIH. 


La producción mundial de opio ascendió a 7.000 toneladas 
en 2011. Si bien esto se sitúa más de una quinta parte por 
debajo de la cifra máxima alcanzada en 2007, constituye 
un aumento si se compara con el bajo nivel correspondiente 
a 2010, año en que una enfermedad vegetal causó la 
destrucción de casi la mitad de la cosecha de adormidera 
de opio en el Afganistán, que sigue siendo el mayor productor 
del mundo. La superficie total de cultivo del arbusto 
de coca en el mundo disminuyó en un 18% entre 2007 y 
2010 y en un 33% desde 2000. Sin embargo, los esfuerzos 
por reducir el cultivo y la producción de las principales 
drogas problemáticas derivadas de plantas se han visto con-


es el Equipo de tareas del sistema de las Naciones Unidas 
sobre la delincuencia organizada transnacional y el tráfico 
de drogas, establecido en 2011. 


En diciembre de 2011 se puso en marcha el Programa 
regional de la UNODC para el Afganistán y los países 
vecinos. A fin de apoyar este programa, la UNODC y sus 
asociados han creado iniciativas transfronterizas, de inteligencia 
y de control de precursores destinadas a intercambiar 
información y experiencias y llevar a cabo operaciones 
conjuntas. Todas estas iniciativas regionales están interconectadas 
con las redes de aplicación de la ley existentes. 


Existen además nuevas iniciativas destinadas a combatir el 
blanqueo de dinero y a vincular la aplicación de la ley con 
la búsqueda de medios de sustento alternativos. También 
se ha puesto en marcha una iniciativa encaminada a desmantelar 
el tráfico de drogas por mar en el Asia occidental 
y meridional. La UNODC ha creado asimismo un nuevo 
programa regional para Europa sudoriental con el propósito 
de centrar la atención en las zonas a través de las cuales la 
heroína procedente de la ruta de los Balcanes se introduce 
en Europa. 


Se ha establecido en Panamá un centro de coordinación 
regional para Centroamérica y el Caribe. La Oficina 
Regional de la UNODC para México y otros países de la 



iviv
PREFACIO 


Reequilibrio de la política de fiscalización de 
drogas mediante el desarrollo alternativo, la 
prevención, el tratamiento y los derechos 
humanos fundamentales 


La UNODC continuará fomentando la cooperación internacional 
y ayudando a los Estados Miembros a responder 
a esas amenazas. Sin embargo, si hemos de afrontar esos 
desafíos, es necesario reducir tanto la oferta como la 
demanda. Se reconoce cada vez más que el tratamiento y 
la rehabilitación de los consumidores de drogas ilícitas son 
más eficaces que el castigo. 


Desde luego, no se trata de abandonar las actividades de 
aplicación de la ley; más bien, la oferta y la demanda deben 
complementarse. Esto significa equilibrar nuestros esfuerzos 
de lucha contra el tráfico de drogas con programas de 
desarrollo alternativo para los agricultores y apoyar la rehabilitación 
de los consumidores de drogas y su reinserción 
en la sociedad. 


El desarrollo alternativo es la clave para reducir los cultivos 
destinados a la producción de drogas ilícitas. Actualmente 
sólo alrededor de la cuarta parte del total mundial de agricultores 
que participan en el cultivo ilícito tiene acceso a 
la asistencia para el desarrollo. Esto debe cambiar si hemos 
de ofrecer nuevas oportunidades y alternativas genuinas. 


La UNODC también promueve actividades que redunden 
en una reducción notable de la demanda de drogas ilícitas. 
Esas actividades son necesarias habida cuenta de los crecientes 
indicios de consumo de drogas en los llamados 
países de tránsito. Por ejemplo, los consumidores decocaína en el África occidental y central son cada vez más 
numerosos; y las tasas más altas de prevalencia del consumo 
de opio y heroína se registran en el Afganistán y la 
República Islámica del Irán. 


La fiscalización de drogas tiene por objeto restablecer el 
equilibrio y prestar más atención al aspecto sanitario mediante 
la reducción de los casos de sobredosis, los problemas 
psiquiátricos y la incidencia de infecciones como el VIH 
y la hepatitis. La prevención, el tratamiento, la rehabilitación 
y la salud deben reconocerse como elementos fundamentales 
de la estrategia mundial para reducir la 
demanda de drogas. Para respaldar sus actividades, la 
UNODC aplica un enfoque centrado en los derechos 


humanos, las convenciones sobre fiscalización internacional 
de drogas y los principios y normas internacionales. 


Ir hacia adelante y no hacia atrás 


Recientemente varios países afectados por las altas tasas de 
violencia, secuestros, corrupción y tráfico de seres humanos 
relacionadas con la delincuencia organizada transnacional 
y el tráfico de drogas han solicitado asistencia internacional. 
Estos países necesitan nuestro apoyo. Es nuestra 
responsabilidad común hacer todo lo posible por 
ayudarles. 


En ese empeño, debemos tener muy presente asimismo la 
importancia de las convenciones internacionales relativas 
a las drogas, la delincuencia organizada y la corrupción. 
De hecho, casi todas las cuestiones mencionadas en el presente 
prefacio –la concentración de los esfuerzos en la 
demanda de drogas, la rehabilitación y la reinserción, el 
desarrollo alternativo, la responsabilidad común y los derechos 
humanos fundamentales– son conceptos relevantes 
de esas convenciones. 


La Comisión de Estupefacientes resumió este propósito 
cuando, en su resolución 55/3, relativa al 100 aniversario 
de la Convención Internacional del Opio, expresó su determinación 
de fortalecer la adopción de medidas y la cooperación 
en los planos nacional, regional e internacional 
para el logro de las metas de las convenciones sobre fiscalización 
internacional de drogas, que siguen siendo la piedra 
angular del sistema de fiscalización internacional de drogas. 
Nuestra dirección se guía por las convenciones internacionales 
en materia de fiscalización de drogas y prevención 
del delito. Debemos avanzar al unísono; de lo contrario, 
corremos el riesgo de ir hacia atrás y no hacia adelante. 


Yury Fedotov 
Director Ejecutivo 
Oficina de las Naciones Unidas contra 
la Droga y el Delito 



INFORME sanitarias de las drogas ilícitas no ha cambiado sustancial-
mente, a no ser por una recurrencia de las altas tasas de 
producción de opio en el Afganistán tras la enfermedad 
que aquejó a la adormidera de opio en 2010 y la resultante 
cosecha deficitaria. Sin embargo, aunque las aguas revueltas 
de los mercados mundiales de drogas ilícitas parecen 
haberse calmado, es posible detectar desplazamientos y 
cambios subyacentes en sus flujos y corrientes. Estos cam-
bios son considerables y, además, preocupantes, no por la 
forma en que afectan los datos actuales sino porque dem-
uestran la flexibilidad y adaptabilidad de los proveedores 
y los consumidores de drogas, así como por las repercu-
siones futuras que esas modificaciones podrían tener en los 
principales mercados mundiales de drogas. 
El panorama mundial 
El volumen de consumo mundial de drogas ilícitas se man-
tuvo estable durante cinco años hasta finales de 2010 entre 
el 3,4% y el 6,6% de la población adulta (personas de 15 
a 64 años). Sin embargo, entre un 10% y un 13% de los 
usuarios de drogas siguen siendo consumidores problemáti-
cos con drogodependencia y/o trastornos relacionados con 
el consumo de drogas; la prevalencia del VIH (estimada 
en aproximadamente un 20%), la hepatitis C (46,7%) y 
la hepatitis B (14,6%) entre los usuarios que se inyectan 
la droga continúa sumándose a la carga mundial de mor-
bilidad; y, por último, pero no por ello menos importante, 
Opioides 
Con una prevalencia anual estimada entre el 0,6% y el 
0,8% de la población de 15 a 64 años, el consumo de opi-
oides (especialmente heroína, morfina y opioides de venta 
con receta consumidos con fines no médicos) se mantiene 
estable en todos los principales mercados. Tras un descenso 
pasajero de la producción mundial en 2010 debido a la 
enfermedad que aquejó a la adormidera de opio en el 
Afganistán, la producción ha vuelto a alcanzar un nivel 
cercano al de 2009. La media de los precios al por mayor 
y al por menor en los mercados de opiáceos que son objeto 
Prevalencia (%) Número (miles) 
Baja Alta Baja Alta 
Cannabis 2,6 5,0 119 420 224 490 
Opioides 0,6 0,8 26 380 36 120 
Opiáceos 0,3 0,5 12 980 20 990 
Cocaína 0,3 0,4 13 200 19 510 
Estimulantes 
de tipo 
anfetamínico 
0,3 1,2 14 340 52 540 
“Éxtasis” 0,2 0,6 10 480 28 120 
Cualquier 
droga ilícita 3.4 6.6 153 000 300 000 
Prevalencia (%) Número (miles) 
Baja Alta Baja Alta 
Cannabis 2,6 5,0 119 420 224 490 
Opioides 0,6 0,8 26 380 36 120 
Opiáceos 0,3 0,5 12 980 20 990 
Cocaína 0,3 0,4 13 200 19 510 
Estimulantes 
de tipo 
anfetamínico 
0,3 1,2 14 340 52 540 
“Éxtasis” 0,2 0,6 10 480 28 120 
Cualquier 
droga ilícita 3.4 6.6 153 000 300 000 
RESUMEN EJECUTIVO 
El capítulo I del Informe Mundial sobre las Drogas del 
presente año contiene un panorama general de las tendencias 
recientes y de la situación relativa a las drogas en términos 
de su producción, tráfico ilícito y consumo, así 
como de las consecuencias del uso de drogas ilícitas en lo 
que respecta al tratamiento y las enfermedades y muertes 
relacionadas con dicho uso. 


En el capítulo II se traza una perspectiva a largo plazo sobre 
las características y la evolución del problema de la droga 
y los principales factores que han incidido en él. Tras un 
examen de las principales características del problema contemporáneo 
de la droga se hace una reseña general de los 
cambios observados en los últimos decenios, para concluir 
con un análisis de las fuerzas motrices que han conformado 
la evolución de dicho problema, incluida una breve proyección 
de sus probables tendencias futuras. 


CAPÍTULO I. ESTADÍSTICAS 
RECIENTES Y ANÁLISIS DE LAS 
TENDENCIAS DE LOS MERCADOS 
DE DROGAS ILÍCITAS 


Los datos disponibles más recientes indican que la situación 
mundial del consumo, la producción y las consecuencias 


aproximadamente una de cada 100 muertes de adultos se 
debe al consumo de drogas ilícitas. 


Los opioides siguen siendo el tipo de droga predominante 
en la demanda de tratamiento en Asia y Europa y también 
contribuyen notablemente a la demanda de tratamiento 
en África, América del Norte y Oceanía. El tratamiento 
relacionado con el consumo de cocaína está en demanda 
principalmente en las Américas, mientras que el cannabis 
es la droga que da lugar a la mayor demanda de tratamiento 
en África. La demanda de tratamiento relacionada 
con el consumo de estimulantes de tipo anfetamínico es 
más común en Asia. 


A nivel mundial, las dos drogas ilícitas de mayor consumo 
siguen siendo el cannabis (prevalencia anual mundial entre 
el 2,6% y el 5,0%) y los estimulantes de tipo anfetamínico, 
excluido el “éxtasis” (0,3% a 1,2%), aunque los datos relativos 
a su producción son escasos. Se ha observado que la 
producción y el cultivo totales de coca se mantienen estables, 
mientras que la producción de opio ha vuelto a alcanzar 
niveles comparables a los de 2009. La prevalencia anual 
mundial correspondiente a la cocaína y a los opiáceos (opio 
y heroína) se ha mantenido estable, respectivamente entre 
el 0,3% y el 0,4% y entre el 0,3% y el 0,5% de la población 
adulta de 15 a 64 años de edad. 



22
INFORME MUNDIAL SOBRE LAS DROGAS 2012 


de un seguimiento más constante, en Europa occidental y 
central y en las Américas, tampoco ha registrado cambios 
significativos desde 2009, aunque ello no refleja la situación 
observada en importantes países productores de 
opio como el Afganistán y Myanmar donde, pese a un 
aumento de la producción de opio, los precios en granja 
siguieron subiendo en 2010 y 2011. 


Esto último puede significar que la demanda ilícita de opio 
y sus derivados continúa en aumento pese a la reciente 
recuperación de la producción de opio. Aunque resulta 
difícil atribuirlo a una razón específica, podría tratarse de 
una subestimación del consumo mundial de heroína, especialmente 
en países de Asia que constituyen mercadosimportantes y en países de África que podrían ser mercados 
emergentes, o bien de una expansión del mercado de opio 
crudo (no procesado en forma de heroína), la cual podría 
fomentar un mayor consumo de opio y tal vez dar lugar a 
un mercado ilícito paralelo de opiáceos como la morfina. 
El aumento de los precios en la fuente también podría 
deberse a la especulación en el mercado local. 


Si bien es demasiado pronto para conocer exactamente el 
impacto que ha tenido en los principales mercados ilícitos 
de opiáceos la cosecha deficiente de adormidera opio de 
2010 en el Afganistán, en la mayoría de los países que se 
proveen de opiáceos del Afganistán hubo una disminución 
general de las incautaciones en 2010 y en algunos países 
europeos se observó una escasez de heroína en 2010-2011. 
Hay indicios de que esa escasez ha motivado a los consumidores 
de algunos países a reemplazar la heroína por otras 
sustancias como la desomorfina (también conocida como 
“krokodil”), el opio acetilado (conocido como “kompot”) 
y opioides sintéticos como el fentanilo y la buprenorfina. 


Pese a que se siguen traficando grandes cantidades de 
heroína por la ruta principal de los Balcanes, que va del 
Afganistán a Europa occidental y central pasando por 
Europa sudoriental, la mayoría de los países de esas regiones 
comunicó un menor número de incautaciones en 2010. 
Sin embargo, en los mercados costeros de África, así como 
en los países del Asia sudoriental, se registra un aumento 
de las incautaciones. Ya se trate de una búsqueda de nuevas 
rutas por los traficantes o de una tendencia ascendente del 
consumo de heroína en esos lugares, la falta de datos disponibles 
no permite sacar conclusiones definitivas. Lo que 
sí resulta evidente es que el mercado de opiáceos sigue 
siendo sumamente flexible y adaptable. 


Cocaína 


La estabilidad general del consumo y la fabricación de 
cocaína a nivel mundial encubre tendencias diferentes en 
los distintos países y regiones. A la luz de los datos disponibles 
sobre cultivo, producto y tráfico, la fabricación mundial 
de cocaína ha registrado una disminución general a 
raíz de un notable descenso de la fabricación de esa droga 
en Colombia durante el quinquenio 2006-2010. Ha ocurrido 
un considerable desplazamiento a medida que, durante 
ese mismo período, el cultivo del arbusto de coca y la pro




ducción de coca aumentaban en los otros dos países productores 
de coca, Bolivia (Estado Plurinacional de) y el 
Perú, que se perfilan como productores cada vez más 
importantes. 


Los principales mercados de cocaína siguen estando en 
América del Norte, Europa y Oceanía (especialmente Australia 
y Nueva Zelandia). En América del Norte se ha registrado 
una clara disminución del consumo de cocaína, 
atribuible sobre todo a un descenso de las tasas de los Estados 
Unidos, del 3,0% (2006) al 2,2% (2010) de los adultos 
de 15 a 64 años; sin embargo, no se ha observado una 
disminución similar en Europa, donde el consumo de 
cocaína se estabilizó durante ese período. Los datos más 
recientes procedentes de Australia muestran un aumento 
del consumo de cocaína. 


Hay indicios de que, mientras el mercado de los Estados 
Unidos seguía proveyéndose casi exclusivamente de cocaína 
producida en Colombia, en los mercados europeos se 
produjo un desplazamiento a partir de 2006 que compensó, 
al menos parcialmente, la escasez de la cocaína producida 
en Colombia con cocaína fabricada en Bolivia 
(Estado Plurinacional de) y el Perú. La disminución de las 
incautaciones en Europa, pese a la aparente estabilidad de 
la oferta de cocaína de la región, indica que está ocurriendo 
un cambio en las modalidades de tráfico en la medida en 
que los traficantes probablemente recurren cada vez más 
al uso de contenedores. En los Estados Unidos de América, 
la menor disponibilidad de cocaína se ha reflejado en un 
aumento de los precios desde 2007. Sin embargo, en 
Europa no se han observado cambios radicales en los precios 
desde 2007. En general, los precios en dólares se mantuvieron 
estables entre 2007 y 2010 e incluso bajaron en 
algunos países. 


Otro factor que incide en la disponibilidad y, sobre todo, 
en la demanda general de cocaína en distintas regiones es 
la emergencia de mercados de cocaína nuevos, aunque 
pequeños, por ejemplo en Europa oriental y el Asia sudoriental. 
Además, hay algunos indicios de que el tráfico 
ilícito de cocaína a través del África occidental puede haber 
tenido efectos residuales en países de esa subregión haciendo 
de la cocaína una droga problemática junto con la 
heroína. A la luz de ciertos datos, se observa una expansión 
del mercado de cocaína, en particular de la cocaína “crack”, 
en algunos países de América del Sur. 


Estimulantes de tipo anfetamínico 


La fabricación ilícita de estimulantes de tipo anfetamínico 
(principalmente metanfetamina, anfetamina y “éxtasis”), 
el segundo tipo de droga más consumido en el mundo, 
resulta difícil de cuantificar debido a que está muy extendida 
y se realiza a menudo en pequeña escala. Aunque el 
consumo y las incautaciones mundiales de estimulantes de 
tipo anfetamínico se mantuvieron generalmente estables, 
en 2010 se registró un aumento de las incautaciones de 
metanfetamina, que duplicaron con creces la cifra alcanzada 
en 2008, en parte debido al creciente número de 



incautaciones en Centroamérica y el Asia oriental y sudoriental. 
Por primera vez desde 2006, las incautaciones mundiales 
de metanfetamina superaron las incautaciones 
mundiales de anfetamina, que descendieron en un 42% (a 
19,4 toneladas) principalmente a causa de una disminución 
del número de incautaciones en el Cercano Oriente y el 
Oriente Medio y en el Asia sudoccidental. 


Pese a un auge importante del desmantelamiento de laboratorios 
de anfetamina clandestinos, las incautaciones de 
anfetamina en Europa continuaron su tendencia descendente 
y alcanzaron su nivel más bajo desde 2002 (5,4 toneladas). 
No obstante, hay indicios de recuperación en el 
mercado europeo de “éxtasis”, habida cuenta de que las 
incautaciones de sustancias del grupo “éxtasis” aumentaron 
a más del doble (de 595 kg en 2009 a 1,3 toneladas en 
2010). La disponibilidad y el consumo de esta droga también 
parecen estar aumentando en los Estados Unidos, 
paralelamente a un creciente número de incautaciones de 
“éxtasis” en Oceanía y el Asia sudoriental. 


Por otra parte, todo parece indicar que las organizaciones 
delictivas involucradas en el contrabando de estimulantes 
de tipo anfetamínico, especialmente metanfetamina, explotan 
el África occidental de manera similar a los traficantes 
de cocaína. En 2008 comenzaron a aumentar las incautaciones 
de metanfetamina procedente del África occidental; 
esta sustancia era objeto de contrabando a los países del 
Asia oriental, en particular el Japón y la República de 
Corea. 


Cannabis 


El cannabis es la sustancia ilícita más consumida mundialmente: 
existen entre 119 y 224 millones de consumidores 
de cannabis en todo el mundo y el consumo se mantiene 
estable. Los datos relativos a las incautaciones y la erradicación 
del cannabis indican que la producción de hierba 
de cannabis (marihuana) está cada vez más extendida, 
aunque es muy difícil cuantificarla debido al carácter a 
menudo localizado y en pequeña escala de su cultivo y 
producción. Con respecto a la producción mundial en 
mayor escala de resina de cannabis (hachís), sólo se dispone 
de nuevos datos en relación con el Afganistán. 


La importancia relativa de la resina y de la hierba de cannabis 
varía según la región; la resina de cannabis predomina 
en el Cercano Oriente y el Oriente Medio y el Asia sudoccidental, 
mientras que en el África septentrional y Europa 
los mercados de resina de cannabis y de hierba de cannabis 
son de tamaño comparable. En el resto del mundo, incluidos 
los Estados Unidos, donde la producción sigue siendo 
elevada, predomina la hierba de cannabis. Los datos relativos 
a África son escasos, pero las estadísticas de incautación 
indican que la hierba también es la forma 
predominante de cannabis en esta región, excepto en el 
África septentrional, donde prevalece la resina. 


Se supone que la producción de resina de cannabis es muy 
reducida en Europa, aunque esta región es el mercado más 
grande de resina de cannabis del mundo y el África sep-


Resumen ejecutivo 


tentrional es desde hace mucho tiempo su principal 
proveedor. La mayor parte de la resina de cannabis procedente 
del África septentrional que se consume en Europa 
proviene tradicionalmente de Marruecos; sin embargo, a 
la luz de datos recientes, la importancia relativa de este país 
como proveedor podría estar en descenso. De hecho, el 
Afganistán parece ser actualmente uno de los principales 
países del mundo en términos de producción de resina de 
cannabis. 


La proliferación del cultivo de cannabis de interior y las 
diversas tendencias de los precios y las incautaciones de 
hierba y de resina de cannabis indican un posible desplazamiento 
en el mercado europeo de cannabis en desmedro 
del predominio de la resina respecto de la hierba de cannabis, 
teniendo en cuenta que la mayoría de los Estados 
miembros de la Unión Europea han comunicado que el 
cultivo de hierba de cannabis es un fenómeno que parece 
estar en aumento.1 Aunque suelen ser de escala limitada, 
los lugares de cultivo bajo techo pueden también albergar 
operaciones de mayor envergadura a cargo de grupos de la 
delincuencia organizada, que con frecuencia optan por 
satisfacer la demanda de los mercados locales a fin de 
reducir el riesgo inherente al tráfico de cannabis. 


Por otra parte, el aumento del cultivo de cannabis bajo 
techo suele ir acompañado de una mayor potencia del cannabis, 
lo que apenas se refleja en las estadísticas. Ese 
aumento de la potencia puede explicar, al menos en parte, 
la creciente demanda de tratamiento observada entre los 
consumidores de cannabis, aunque ello también puede 
vincularse a los efectos acumulativos del uso prolongado 
de cannabis. 


Más allá del “colocón” tradicional: 
nuevas sustancias y consumo con 
fines no médicos de fármacos de 
venta con receta 


No se dispone de cifras mundiales relativas al consumo con 
fines no médicos de las drogas de venta con receta distintas 
de los opioides y las anfetaminas. Sin embargo, se ha informado 
de que dicho consumo constituye un problema sanitario 
cada vez más grave, con tasas de prevalencia que 
superan las de numerosas sustancias sometidas a fiscalización 
en muchos países. Por ejemplo, en los Estados 
Unidos se comunicó una prevalencia durante toda la vida, 
anual y mensual del consumo con fines no médicos de 
fármacos psicoterapéuticos (en su mayoría analgésicos) del 
20,4%, el 6,3% y el 2,7% respectivamente entre las personas 
mayores de 12 años en 20102, tasas superiores a las 
del resto de las drogas excepto el cannabis. Y si bien el 



Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías, Informe anual 


2011: El problema de la drogodependencia en Europa (Luxemburgo, 


Oficina de Publicaciones de la Unión Europea, 2011). 



Estados Unidos de América, Department of Health and Human 
Services, Substance Abuse and Mental Health Services Administration, 


Results from the 2010 National Survey on Drug Use and Health: Summary 
of National Findings, NSDUH Series H-41, HHS Publication No. 
SMA 11-4658 (Rockville, Maryland, 2011). 


3
INFORME 



44
INFORME MUNDIAL SOBRE LAS DROGAS 2012 


consumo de drogas ilícitas suele ser mucho mayor entre 
los hombres que entre las mujeres, el uso de tranquilizantes 
y sedantes con fines no médicos por las mujeres, en los 
países sobre los que se dispone de datos (en América del 
Sur, Centroamérica y Europa), es una notable excepción a 
la regla (y supera el consumo de cannabis).3 Además, hay 
indicios de un creciente consumo de estas sustancias en 
combinación con sustancias ilícitas más tradicionales, una 
forma de politoxicomanía destinada ya sea a potenciar o a 
contrarrestar sus efectos. 


Asimismo, se observa la aparición y el consumo cada vez 
más frecuentes de nuevas sustancias psicotrópicas cuya 
composición química se concibe de modo a circunvenir la 
fiscalización internacional. Muchos países de todas las 
regiones, en particular Europa, América del Norte y 
Oceanía, informaron del consumo de tales sustancias como 
una de las tendencias emergentes en 2010. Entre las más 
notables de esas sustancias se incluía el análogo de la metcatinona 
4-metilmetcatinona (conocida también como 
mefedrona), y la metilendioxipirovalerona (MPDV), vendidas 
a menudo como “sales de baño” o “alimento vegetal” 
y utilizadas como sucedáneos de estimulantes sujetos a 
fiscalización como la cocaína o el “éxtasis”. De modo similar, 
los derivados de la piperazina4 se venden como sucedáneos 
del “éxtasis”, y desde 2008 se vienen detectando en 
las mezclas de hierbas para fumadores varios cannabinoides 
sintéticos que emulan el efecto del cannabis pero contienen 
productos no sujetos a fiscalización. 


Las organizaciones del tráfico ilícito de drogas siguen 
adaptando sus estrategias de fabricación a fin de evitar la 
detección y esas modificaciones del proceso de fabricación 
ilícita de sustancias sintéticas presentan nuevos desafíos a 
las autoridades de fiscalización de drogas en todo el mundo. 


Problemas en materia de datos 


Quedan por resolver considerables problemas relacionados 
con la presentación de datos sobre las tendencias del consumo, 
la producción y el tráfico de drogas ilícitas. Los 
principales problemas siguen siendo la disponibilidad y la 
presentación de datos sobre los distintos aspectos de la 
demanda y la oferta de drogas ilícitas en los Estados Miembros. 
La falta de datos es particularmente aguda en África 
y en partes de Asia, donde los datos sobre la prevalencia 
del consumo y las tendencias de las drogas ilícitas son, en 
el mejor de los casos, vagos. Otros aspectos como los precios 
y la pureza de las drogas, las pautas de incautación y 
de tráfico y las dificultades metodológicas para calcular, en 
algunas regiones, la producción ilícita de sustancias -en 
particular cannabis y estimulantes de tipo anfetamínico- 
constituyen trabas para el análisis y la elaboración de una 





De hecho, la prevalencia mensual del consumo de tranquilizantes por 
mujeres en América del Sur (1,3%) y en Europa (4,2%) es superior a 
la prevalencia anual del consumo de cannabis por mujeres en América 
del Sur (1,0%) o Europa (3,5%). 





Entre esos derivados cabe mencionar la N-benzilpiperazina (BZP) y la 
3-trifluorometil-fenil-piperazina. 


perspectiva integral del constantemente fluctuante mercado 
de drogas ilícitas. La mayor parte de esos problemas puede 
superarse mediante esfuerzos sostenidos en las regiones y 
los países prioritarios a fin de apoyar y mejorar la reunión 
de datos de calidad sobre esos diferentes aspectos del consumo 
de drogas ilícitas. Sólo de esta forma podrán cuantificarse 
debidamente los altos y bajos del mercado mundial 
de drogas ilícitas. 


CAPÍTULO II. EL PROBLEMA 
CONTEMPORÁNEO DE LA DROGA: 
CARACTERÍSTICAS, PAUTAS Y 
FUERZAS MOTRICES 


Características fundamentales del 
problema contemporáneo de las 
drogas ilícitas 


Aunque las sustancias psicoactivas se consumen desde hace 
miles de años, en los últimos decenios el problema de la 
droga ha cobrado ciertas características clave ante un telón 
de fondo punteado por rápidas transiciones socioeconómicas 
en varios países. Actualmente el consumo de drogas 
ilícitas se caracteriza por su concentración entre los jóvenes 
-en particular los hombres jóvenes de entornos urbanos- y 
por una creciente gama de sustancias psicoactivas. Aunque 
en muchos países desarrollados los mercados establecidos 
de drogas ilícitas han mostrado señales de estabilización, 
el aumento del consumo de drogas parece seguir siendo 
una constante en muchos países en desarrollo. 


Si bien la producción, el tráfico y el consumo de drogas 
ilícitas siguen siendo motivos de preocupación, gracias al 
sistema de fiscalización internacional de drogas parece 
haberse logrado mantener el consumo de drogas ilícitas 
bien por debajo de los niveles de consumo comunicados 
respecto de las sustancias psicoactivas lícitas. Las estimaciones 
mundiales indican que la prevalencia del consumo 
de tabaco durante el mes anterior a la reunión de los datos 
(25% de la población mayor de 15 años) es 10 veces superior 
a la prevalencia de consumo de drogas ilícitas durante 
dicho mes (2,5%). La prevalencia anual del consumo de 
alcohol es del 42% (teniendo en cuenta que el consumo 
de alcohol es legal en la mayoría de los países), cifra que es 
ocho veces superior a la prevalencia anual del consumo de 
drogas ilícitas (5,0%). La prevalencia del consumo semanal 
episódico intenso de alcohol es ocho veces superior al consumo 
problemático de drogas. El consumo de drogas representa 
el 0,9% del total de años de vida ajustados en 
función de la discapacidad perdidos a nivel mundial, o el 
10% del total de años de vida perdidos como resultado del 
consumo de sustancias psicoactivas (drogas, alcohol y 
tabaco). 


Los niveles de consumo de drogas probablemente serían 
superiores si no obrara un efecto de contención basado en 
la edad. El sistema de fiscalización internacional de drogas 



parece estar frenando el consumo de drogas, especialmente 
entre los adultos que están menos dispuestos a transgredir 
las leyes por el hecho de consumir drogas. Si bien la iniciación 
al consumo de sustancias psicoactivas suele ocurrir 
durante la adolescencia o la primera juventud, el consumo 
(legal) de tabaco y alcohol continúa en proporciones 
mucho mayores a medida que avanza la edad en los mismos 
grupos demográficos. El consumo de khat -legal en cierto 
número de países- acusa pautas similares. Frente a una 
prevalencia del consumo de khat en el Yemen entre las 
personas mayores de 61 años que es sólo un 13% inferior 
a la del grupo de 21 a 30 años, el consumo de cannabis en 
los Estados Unidos entre los mayores de 61 años es aproximadamente 
un 93% inferior al del grupo de 21 a 30 años. 
En otras palabras, el consumo de sustancias psicoactivas 
legales tiende a estar distribuido de forma mucho más 
homogénea entre los distintos grupos de edad que el consumo 
de drogas ilícitas. 


Existe además una diferencia pronunciada entre los géneros 
en cuanto al consumo de drogas ilícitas, el cual es mucho 
menor entre las mujeres que entre los hombres en casi todos 
los países para los que se dispone de datos fiables desglosados 
por sexo. En los Estados Unidos, donde la diferencia 
de consumo entre los géneros es pequeña, el consumo de 
drogas por mujeres representa aproximadamente la tercera 
parte del consumo por hombres, mientras que en otros 
países, incluidas la India e Indonesia, el consumo de drogas 
por mujeres no pasa de la décima parte del de los hombres, 
aunque es posible que las estadísticas no reflejen todos los 
casos de consumo de drogas por mujeres. Sin embargo, hay 
algunos indicios de que esa disparidad de consumo entre 
los géneros podría estar disminuyendo en algunos mercados 
de drogas ilícitas muy firmemente establecidos, especialmente 
en el ámbito de los jóvenes. No obstante, la 
excesiva representación de los hombres en la población de 
consumidores de drogas, confirmada por las encuestas de 
hogares, las pruebas de drogas en los lugares de trabajo, los 
datos relativos al tratamiento, las estadísticas de detención 
y otros datos pertinentes, sigue siendo una característica 
saliente de las pautas de consumo de drogas. 


El impacto en la sociedad 


Una de las repercusiones más importantes del consumo de 
drogas ilícitas son las consecuencias adversas que ello tiene 
para la salud de los miembros de la sociedad. El consumo 
de drogas también supone una gravosa carga financiera 
para la sociedad. En términos monetarios, se requerirían 
unos 200.000 a 250.000 millones de dólares (entre un 
0,3% y un 0,4% del PIB mundial) para sufragar todos los 
costos de tratamiento relacionados con las drogas en todo 
el mundo. En realidad, las sumas reales destinadas al 
tratamiento de la toxicomanía son muy inferiores y menos 
de una de cada cinco personas que necesita dicho tratamiento 
lo recibe. 


El impacto del consumo de drogas ilícitas en la productividad 
de una sociedad -en términos monetarios- parece 


Resumen ejecutivo 


ser aun mayor. Según un estudio realizado en los Estados 
Unidos, las pérdidas de productividad eran equivalentes al 
0,9% del PIB y en estudios realizados en otros países se 
citaban pérdidas del orden del 0,3% al 0,4% del PIB. 


Los costos derivados de la delincuencia relacionada con las 
drogas también son considerables. Según un estudio, en el 
Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte los 
costos resultantes de la delincuencia relacionada con las 
drogas (fraude, robo con fuerza en las cosas, robo con violencia 
o intimidación y hurto en tiendas) en Inglaterra y 
Gales representaban el 1,6% del PIB, o un 90% del total 
de los costos económicos y sociales relacionados con la 
toxicomanía. 


Evolución de las pautas del problema 
de la droga a lo largo del tiempo 


Si bien varias de las características generales se han mantenido 
relativamente constantes durante las últimas décadas, 
no cabe duda de que las pautas de la producción, el 
tráfico y el consumo de drogas ilícitas han experimentado 
cambios considerables. 


Los mercados ilícitos de opiáceos -el tipo de droga más 
problemático- han mostrado una clara declinación a lo 
largo del último siglo. La producción tanto lícita como 
ilícita de opio (incluida la de paja de adormidera) registró 
un descenso de aproximadamente tres cuartos entre 19061907 
y 2010. Esta evolución descendente ocurrió principalmente 
durante la primera mitad del siglo XX. Los 
niveles mundiales de producción de opio volvieron a 
aumentar hasta 2000, año a partir del cual se mantuvieron 
básicamente estables. Mientras que el consumo de opiáceos 
se ha estabilizado o reducido durante el último decenio en 
Europa occidental (que fue por largo tiempo el principal 
mercado de consumo de heroína), la situación en otros 
mercados ha sido mixta. 


En contraste, el mercado mundial de cocaína se ha expandido 
desde finales del siglo XIX y sólo recientemente ha 
venido mostrado una tendencia a la baja. La producción 
mundial de cocaína registró un marcado aumento en las 
décadas de 1980 y 1990 y recién se ha estabilizado en el 
último decenio. Sin embargo, en los últimos años, las cantidades 
de cocaína disponibles para el consumo -una vez 
restadas las incautaciones efectuadas a lo largo de las rutas 
de tránsito- parecen haber disminuido. El consumo de 
cocaína en América del Norte, la región con el mercado 
de cocaína más grande, ha declinado considerablemente 
durante el último decenio, aunque esa reducción se ha visto 
contrarrestada en parte por un creciente consumo en 
Europa y América del Sur. 


Como lo ha sido en el pasado, el cannabis sigue siendo la 
droga ilícita más consumida en todo el mundo. Si bien en 
varios países desarrollados el consumo de cannabis se ha 
estabilizado o está en descenso, en muchos países en desarrollo 
continúa aumentando. El cultivo hidropónico de 
cannabis, a menudo bajo techo, es común actualmente en 


5
INFORME 



66
INFORME MUNDIAL SOBRE LAS DROGAS 2012 


muchos países desarrollados. Esto ha redundado en una 
mayor potencia de la droga y ha permitido acortar la vía 
de abastecimiento y reducir la necesidad de tráfico 
interregional. 


La fabricación y el consumo ilícitos de estimulantes de tipo 
anfetamínico siguen aumentando, en contraste con las 
actuales tendencias generales de las drogas derivadas de 
plantas. Durante el período 1998-2010, las incautaciones 
mundiales de estimulantes de tipo anfetamínico prácticamente 
se triplicaron, incremento muy superior al registrado 
con respecto a las drogas derivadas de plantas. Los mayores 
aumentos de la demanda durante el último decenio han 
sido comunicados por países de Asia. 


El consumo de drogas es un fenómeno dinámico en que 
los usuarios ensayan distintas combinaciones de drogas, a 
veces mezclando drogas lícitas e ilícitas, así como distintas 
modalidades de consumo. Hay informes de que la politoxicomanía, 
es decir, el consumo de sustancias diversas ya sea 
de forma simultánea o sucesiva, es cada vez más frecuente 
en muchos países. Si bien la combinación de sustancias 
más común es la del alcohol con diferentes drogas ilícitas, 
otras combinaciones como el “speedball”, una mezcla de 
cocaína y heroína, también son frecuentes en muchos 
lugares. Un gran número de países comunica altos niveles 
de consumo de drogas de venta con receta con fines no 
médicos. El consumo de opioides con fines no médicos 
resulta especialmente problemático y es la causa de que en 
los Estados Unidos las muertes por sobredosis de opioides 
de venta con receta se hayan cuadruplicado desde 1999. 


Factores que inciden en la evolución 
del problema 


La evolución del complejo problema mundial de las drogas 
ilícitas se ve impulsada claramente por una serie de factores. 
Entre éstos, cabe mencionar la influencia de las tendencias 
sociodemográficas, como los equilibrios de género y de 
edad en la población y la tasa de urbanización. Si el perfil 
demográfico de una determinada sociedad se modifica, es 
posible que el comportamiento frente al consumo de 
drogas refleje a su vez esos cambios. Inciden asimismo en 
esa evolución los factores socioeconómicos, como los niveles 
de ingreso disponible, desigualdad y desempleo. Un 
nivel más elevado de ingreso disponible puede hacer que 
un mayor número de personas esté en condiciones de 
adquirir drogas ilícitas, mientras que una alta tasa de 
desigualdad o desempleo puede aumentar la propensión a 
consumir drogas ilícitas entre los grupos afectados. Una 
extensa categoría de fuerzas motrices de índole sociocultural 
-incluidos los cambios en los sistemas de valores tradicionales 
y el surgimiento de una “cultura juvenil” 
relativamente uniforme en muchos países- también influye 
en la evolución del problema, aunque de formas a menudo 
difíciles de cuantificar. El análisis muestra asimismo que 
la existencia de peligros inherentes a las drogas y las percepciones 
conexas figuran entre las variables clave que 
determinan el consumo de drogas. 


El sistema de fiscalización internacional de drogas y su 
aplicación han tenido una influencia decisiva en la evolución 
del problema de la droga. Una amplia gama de acontecimientos 
políticos y sociales, generalmente imprevisibles 
y sin aparente relación con la problemática de la toxicomanía, 
también ha alterado fundamentalmente el desafío 
que enfrenta hoy en día el mundo con respecto a las drogas. 
Acontecimientos como la guerra de Viet Nam, así como 
transformaciones más vastas y profundas, como las que 
tuvieron lugar al final de la guerra fría, han repercutido 
indirecta pero sustantivamente en la situación del consumo 
de drogas ilícitas. 


Probable evolución futura del 
problema de la droga 


Un acontecimiento decisivo que habrá que vigilar es el 
reciente desplazamiento del consumo de los países desarrollados 
a los países en desarrollo, lo que supondría una 
mayor carga para países relativamente menos preparados 
para soportarla. Las tendencias demográficas indican un 
probable aumento sustancial del número total de consumidores 
de drogas en los países en desarrollo, no sólo 
debido al mayor crecimiento demográfico proyectado en 
esas zonas, sino también a su población más joven y a su 
rápida tasa de urbanización. Además, es posible que la 
brecha de consumo entre hombres y mujeres comience a 
cerrarse a medida que aumente el consumo de drogas por 
mujeres en los países en desarrollo como consecuencia de 
la desaparición de las barreras socioculturales y de una 
mayor igualdad de género. 


En términos de sustancias específicas, es posible que la 
prominencia de la heroína y la cocaína en los mercados de 
drogas ilícitas siga disminuyendo. En contraste, no hay 
indicios de que la popularidad del cannabis se resienta 
marcadamente. Es probable que esta droga continúe siendo 
la sustancia ilícita más consumida y que el consumo de 
una gran variedad de drogas sintéticas lícitas e ilícitas siga 
en ascenso. Estas previsiones se basan en el supuesto de 
que ciertos factores clave se mantendrán estables. Sin 
embargo, este supuesto podría no materializarse, dado que 
aún pueden surgir numerosas situaciones y circunstancias 
imprevistas y en gran medida imprevisibles que repercutan 
en el problema, como ha sucedido repetidas veces en el 
pasado. Mientras más se hurga en el futuro, más impredecible 
resulta la evolución. 


Lo que sí puede asegurarse es que los gobiernos y las sociedades 
seguirán enfrentando diversas opciones de política 
al abordar los problemas relacionados con las drogas y la 
delincuencia a la vez que se esfuerzan por lograr la paz y el 
desarrollo internacionales y el respeto de los derechos 
humanos. 



El Informe Mundial sobre las Drogas de la ONU, en cifras
26 de junio de 2012  09:36

El Informe Mundial sobre las Drogas de 2012, publicado hoy por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), destaca que los mercados de los narcóticos tradicionales se han estabilizado, mientras que aumentan los de las sustancias sintéticas.
Estas son las principales cifras del documento:
-Unos 230 millones de personas, el 5 % de la población mundial de 15 a 64 años, consumieron alguna droga por lo menos una vez en 2010, un nivel que se ha mantenido estable desde 2005.
-Los "consumidores problemáticos de drogas" suponen unos 27 millones de personas, el 0,6 % de la población adulta mundial.
-Cada año 200.000 personas mueren en el mundo por los efectos de las drogas sobre la salud.
-En términos monetarios, la ONU calcula que se requieren de entre unos 200.000 millones a 250.000 millones de dólares (entre un 0,3 % y un 0,4 % del PIB mundial) para sufragar todos los costos de tratamiento relacionados con las drogas en todo el planeta.
-El impacto económico del consumo de drogas en la productividad de una sociedad también es tratado en el informe de la ONU. Según un estudio realizado en Estados Unidos, las pérdidas de productividad eran equivalentes al 0,9 % del PIB y en estudios realizados en otros países se citaban mermas del orden del 0,3 % al 0,4 % del PIB.
-La droga más consumida es el cannabis, con entre 119 y 224 millones de personas que la han tomado al menos una vez en 2010. La mayor tasa de consumo se encuentra en Europa y el mayor productor, con el 15 % mundial, es Marruecos. Ese país cultivó 47.500 hectáreas en 2010 y produjo unas 760 toneladas de resina de hachís.
-Las drogas derivadas del opio son consumidos por entre 38 y 56 millones de personas. El mayor productor mundial es Afganistán, cuyas elaboraciones de opio aumentaron en 2011 un 61 %, hasta las 5.800 toneladas, mientras que la producción mundial alcanzó las 7.000 toneladas.
En 2010 la producción mundial fue de 4.700 toneladas. En Asia y África se consume el 70 % de la producción, aunque la ONU lamenta que falten datos al respecto.
-La cocaína es consumida por entre 13 y 19 millones de personas. En 2010 las regiones con mayor prevalencia de uso son América del Norte (1,6 %), Europa Occidental y Central (1,3 %) y Oceanía (1,5-1,9 %).
-Los estimulantes de tipo anfetamínico son consumidos por entre 14 y 52 millones de personas. Mientras que el mercado de las anfetaminas ha permanecido estable, aumentó el de las metanfetaminas, cuyas incautaciones se han duplicado en dos años, hasta las 45 toneladas de 2010.
El incremento continuado de los decomisos de los precursores químicos para la elaboración de drogas sintéticas apunta a un aumento del consumo.
-Los comprimidos de "éxtasis" son consumidos por entre 10 y 28 millones de personas. La ONU reconoce que el "cambio continuo en el proceso de fabricación ilícita de sustancias sintéticas supone una gran variedad de nuevos desafíos a las autoridades".