La Haya. Por eso Piñera dice que fallo no será problema. Pese a ello, presidente chileno teme que tribunal opte por la solución salomónica para evitar un conflicto.
La posición del presidente chileno Sebastián Piñera en torno a que un eventual fallo favorable a su país o a Perú no echaría por tierra la relación bilateral, tan celebrada por el presidente Alan García, respondería a una estrategia del gobierno chileno para salir airoso en el litigio marítimo que ventila el tribunal de La Haya.
Según el diario chileno La Tercera, es por esa razón que el mandatario chileno, en su reciente visita a Lima, habría dado señales de normalidad en las relaciones peruano- chilenas, aclarando que un fallo no causaría un problema político mayor entre Santiago y Lima.
El matutino dice que son tres las tesis que manejan la cancillería chilena y el Palacio de La Moneda sobre las formas en que los jueces de La Haya zanjarían el litigio en el 2012: resolver en derecho y circunscribirse a los tratados de 1952 y 1954 entre Perú, Chile y Ecuador, teniendo en cuenta el respeto que estos han tenido los últimos 60 años; sancionar con criterio de equidad entre ambas partes; y hacer valer los argumentos de orden político al que apelan la memoria y réplica presentadas por Perú.
El escenario que más se acomoda a Chile es el primero y por eso Piñera apunta a no escalar el conflicto. Al contrario, se ciñe a la tesis jurídica.
“Solo ese camino –creen en La Moneda– llevaría a los jueces a no inclinarse a un dictamen ‘salomónico’ y optar por una solución que evite gatillar un conflicto entre dos países”, dice el artículo titulado ‘Trasfondo del brindis en Lima’, de Francisco Artaza .
El periodista destaca además que, a la par de pretender normalizar la relación con Perú, en La Moneda se ha ordenado a la Cancillería buscar antecedentes legales y administrativos, en manos de entidades chilenas y extranjeras, que ayuden a reforzar la utilización del paralelo geográfico como límite marítimo entre Perú y Chile.
“Así, por ejemplo, se solicitó a las armadas de todos los países que han participado en las diferentes Operaciones Unidas que envíen sus bitácoras de los buques en los que se señalan las coordenadas exactas en las que pedían permiso para ingresar a aguas peruanas o chilenas”, sostiene La Tercera.
La clave
Otro flanco. Según La Tercera, Piñera teme que, ante el poco avance en el diálogo sobre la reivindicación marítima de Bolivia, ese país pueda dar un quiebre en la diálogo bilateral.
La posición del presidente chileno Sebastián Piñera en torno a que un eventual fallo favorable a su país o a Perú no echaría por tierra la relación bilateral, tan celebrada por el presidente Alan García, respondería a una estrategia del gobierno chileno para salir airoso en el litigio marítimo que ventila el tribunal de La Haya.
Según el diario chileno La Tercera, es por esa razón que el mandatario chileno, en su reciente visita a Lima, habría dado señales de normalidad en las relaciones peruano- chilenas, aclarando que un fallo no causaría un problema político mayor entre Santiago y Lima.
El matutino dice que son tres las tesis que manejan la cancillería chilena y el Palacio de La Moneda sobre las formas en que los jueces de La Haya zanjarían el litigio en el 2012: resolver en derecho y circunscribirse a los tratados de 1952 y 1954 entre Perú, Chile y Ecuador, teniendo en cuenta el respeto que estos han tenido los últimos 60 años; sancionar con criterio de equidad entre ambas partes; y hacer valer los argumentos de orden político al que apelan la memoria y réplica presentadas por Perú.
El escenario que más se acomoda a Chile es el primero y por eso Piñera apunta a no escalar el conflicto. Al contrario, se ciñe a la tesis jurídica.
“Solo ese camino –creen en La Moneda– llevaría a los jueces a no inclinarse a un dictamen ‘salomónico’ y optar por una solución que evite gatillar un conflicto entre dos países”, dice el artículo titulado ‘Trasfondo del brindis en Lima’, de Francisco Artaza .
El periodista destaca además que, a la par de pretender normalizar la relación con Perú, en La Moneda se ha ordenado a la Cancillería buscar antecedentes legales y administrativos, en manos de entidades chilenas y extranjeras, que ayuden a reforzar la utilización del paralelo geográfico como límite marítimo entre Perú y Chile.
“Así, por ejemplo, se solicitó a las armadas de todos los países que han participado en las diferentes Operaciones Unidas que envíen sus bitácoras de los buques en los que se señalan las coordenadas exactas en las que pedían permiso para ingresar a aguas peruanas o chilenas”, sostiene La Tercera.
La clave
Otro flanco. Según La Tercera, Piñera teme que, ante el poco avance en el diálogo sobre la reivindicación marítima de Bolivia, ese país pueda dar un quiebre en la diálogo bilateral.
No hay comentarios:
Publicar un comentario