Durante la segunda vuelta peruana se comenzarán a aplicar los medios digitales para medir cómo se comporta el voto electrónico en el distrito de Pacarán, en la provincia limeña de Cañete, emulando lo que ya se ha hecho en Brasil y Venezuela, a nivel país.
Lima. En el Perú está todo listo para el ejercicio cívico eleccionario del próximo domingo 10 de abril. En efecto, según el Padrón Electoral aprobado por el Jurado Nacional de ese país, ese día acudirán a las urnas 19.195.761 ciudadanos para votar por el nuevo presidente de la República, así como por sus representantes en el Congreso y en el Parlamento Andino. A esa cifra se suman, además, los 754.154 residentes en el extranjero con derecho a sufragio.
Así, bien vale analizar el contexto y las novedades tecnológicas consideradas para esa jornada y el más que probable escenario de balotaje, ya que las encuestas indican que ninguno de los diez candidatos a la primera magistratura obtendrá la mayoría absoluta.
De hecho, un sondeo de Datum dado a conocer luego del debate presidencial del domingo 3 de abril, sitúa a Ollanta Humala en primer lugar, con el 26,5% de las preferencias, seguido por Keiko Fujimori, con 19,4%, mientras que Alejandro Toledo es tercero, con 16,7%. En el cuarto puesto aparece Pedro Pablo Kuczynski, con 15,6%, y Luis Castañeda Lossio se ubica en quinta posición, con 10,1%. Los otros aspirantes al Palacio Casa de Pizarro totalizan 0,7%.
En dicho campo de incertidumbre electoral, existirá en la trastienda política de la segunda vuelta un debut tecnológico, la prueba piloto del voto digital en el Perú, iniciativa que en 2010 fue autorizada por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (Onpe), como un cambio progresivo y gradual que garantice la seguridad y confidencialidad, así como la identificación de los ciudadanos y la integridad y transparencia de los resultados.
De este modo, durante el balotaje peruano se comenzarán a aplicar los medios digitales para medir cómo se comporta el voto electrónico en el distrito de Pacarán, en la provincia limeña de Cañete, emulando lo que ya se ha hecho en Brasil y Venezuela, a nivel país.
En la localidad mencionada habrá pantallas táctiles para una votación electrónica presencial, en reemplazo de la manual y de la tradicional papeleta, ya que de la modalidad digital derivan una serie de ventajas.
Guillermo Vilgre La Madrid, director de procesos electorales de Indra en Latinoamérica -empresa con experiencia en este ámbito-, consigna que son básicamente tres los beneficios. “El voto ejecutado por el elector queda contabilizado en el momento que lo emite; no existe la posibilidad de sufragios nulos por error ni reinterpretación de los mismos; y los escrutinios, al menos los provisorios, no sólo son inmediatos, sino que no conllevan la intervención de personas, reduciendo la probabilidad de error", detalla.
El modelo vigente en el Perú. Como ya está dicho, este será un plan piloto en el país sudamericano, y está condicionado al balotaje, por lo que, en primera vuelta, operarán los comicios y conteos manuales, aunque el procesamiento de la información será computarizada.
Así lo explica Piero Corvetto, profesor del departamento académico de ciencias políticas y sociales de la limeña Universidad del Pacífico. “En principio se va a utilizar, como se ha venido haciendo desde hace ya muchos años, un sistema manual de identificación, sufragio y escrutinio. Sin embargo, la transmisión de votos y todo lo que tiene que ver con el cómputo y presentación de resultados, sí está informatizado”.
Al hacer una evaluación respecto de ese método, el académico sostiene que, desde octubre pasado -cuando tuvieron lugar las elecciones regionales y municipales en las que hubo un rezago de varias semanas en la entrega de cómputos finales-, se implementaron una serie de políticas buscando corregir esa tardanza. Por lo pronto, dice que habrá actas independientes para Jefe de Gobierno, Congreso y Parlamento Andino.
“Eso va a permitir que, apenas termine el escrutinio en una mesa, el acta para presidente podrá salir hacia el Centro de Acopio de Local y de ahí al Centro de Cómputos, lo que hará posible que tengamos un resultado mucho más rápido”, plantea Corvetto, añadiendo que lo propio sucederá con las papeletas que lleven los números del Congreso y del Parlamento Andino, respectivamente.
De todas maneras, y consultado en cuanto a si será factible conocer al ganador, o a quienes pasen a segunda vuelta, el mismo domingo 10 de abril, expone que durante esa jornada se dispondrá de un considerable conteo, no obstante “tener el 100% va a tardar, porque hay lugares muy alejados y de difícil acceso, desde los que demora unos tres días la entrega de las actas. A eso hay que agregarle lo que se tarda en llegar la información de los peruanos residentes en otras” naciones.
Costos asociados. En cuanto a la experiencia previa del voto digital, tanto en la región como en otras partes del mundo, Vilgre La Madrid relata que para Indra “ha sido exitosa en todos los casos”, y que “hemos implementado procesos en Argentina desde 2003, también en Inglaterra, Francia y Eslovaquia. Además, hemos hecho pruebas en España, Portugal, Colombia y Chile, en una consulta popular en la comuna de Las Condes, entre otros”.
Sobre los costos vinculados al sufragio electrónico, Vilgre La Madrid detalla que dependen de la cantidad de elecciones simultáneas que se realizan y el modo de efectuarlos, así como de las medidas de control y seguridad, calidad de las boletas y escrutinios provisorios si los hubiera.
“Los costos están más asociados a la periodicidad de los actos electorales y a la amortización de los equipos. Cuando es manual, se reitera el desembolso por cada proceso, mientras que con voto electrónico se tiene una inversión inicial y un valor notoriamente más bajo en los siguientes”, complementa.
Al hacer una comparación con países de la región, se refiere al caso de Brasil, donde esta modalidad se aplicó “en forma creciente, partiendo por un porcentaje de mesas durante varios comicios, por aproximadamente diez años, hasta llegar al 100%. Y parece ser el camino correcto”, sentencia Vilgre La Madrid.
Así, bien vale analizar el contexto y las novedades tecnológicas consideradas para esa jornada y el más que probable escenario de balotaje, ya que las encuestas indican que ninguno de los diez candidatos a la primera magistratura obtendrá la mayoría absoluta.
De hecho, un sondeo de Datum dado a conocer luego del debate presidencial del domingo 3 de abril, sitúa a Ollanta Humala en primer lugar, con el 26,5% de las preferencias, seguido por Keiko Fujimori, con 19,4%, mientras que Alejandro Toledo es tercero, con 16,7%. En el cuarto puesto aparece Pedro Pablo Kuczynski, con 15,6%, y Luis Castañeda Lossio se ubica en quinta posición, con 10,1%. Los otros aspirantes al Palacio Casa de Pizarro totalizan 0,7%.
En dicho campo de incertidumbre electoral, existirá en la trastienda política de la segunda vuelta un debut tecnológico, la prueba piloto del voto digital en el Perú, iniciativa que en 2010 fue autorizada por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (Onpe), como un cambio progresivo y gradual que garantice la seguridad y confidencialidad, así como la identificación de los ciudadanos y la integridad y transparencia de los resultados.
De este modo, durante el balotaje peruano se comenzarán a aplicar los medios digitales para medir cómo se comporta el voto electrónico en el distrito de Pacarán, en la provincia limeña de Cañete, emulando lo que ya se ha hecho en Brasil y Venezuela, a nivel país.
En la localidad mencionada habrá pantallas táctiles para una votación electrónica presencial, en reemplazo de la manual y de la tradicional papeleta, ya que de la modalidad digital derivan una serie de ventajas.
Guillermo Vilgre La Madrid, director de procesos electorales de Indra en Latinoamérica -empresa con experiencia en este ámbito-, consigna que son básicamente tres los beneficios. “El voto ejecutado por el elector queda contabilizado en el momento que lo emite; no existe la posibilidad de sufragios nulos por error ni reinterpretación de los mismos; y los escrutinios, al menos los provisorios, no sólo son inmediatos, sino que no conllevan la intervención de personas, reduciendo la probabilidad de error", detalla.
El modelo vigente en el Perú. Como ya está dicho, este será un plan piloto en el país sudamericano, y está condicionado al balotaje, por lo que, en primera vuelta, operarán los comicios y conteos manuales, aunque el procesamiento de la información será computarizada.
Así lo explica Piero Corvetto, profesor del departamento académico de ciencias políticas y sociales de la limeña Universidad del Pacífico. “En principio se va a utilizar, como se ha venido haciendo desde hace ya muchos años, un sistema manual de identificación, sufragio y escrutinio. Sin embargo, la transmisión de votos y todo lo que tiene que ver con el cómputo y presentación de resultados, sí está informatizado”.
Al hacer una evaluación respecto de ese método, el académico sostiene que, desde octubre pasado -cuando tuvieron lugar las elecciones regionales y municipales en las que hubo un rezago de varias semanas en la entrega de cómputos finales-, se implementaron una serie de políticas buscando corregir esa tardanza. Por lo pronto, dice que habrá actas independientes para Jefe de Gobierno, Congreso y Parlamento Andino.
“Eso va a permitir que, apenas termine el escrutinio en una mesa, el acta para presidente podrá salir hacia el Centro de Acopio de Local y de ahí al Centro de Cómputos, lo que hará posible que tengamos un resultado mucho más rápido”, plantea Corvetto, añadiendo que lo propio sucederá con las papeletas que lleven los números del Congreso y del Parlamento Andino, respectivamente.
De todas maneras, y consultado en cuanto a si será factible conocer al ganador, o a quienes pasen a segunda vuelta, el mismo domingo 10 de abril, expone que durante esa jornada se dispondrá de un considerable conteo, no obstante “tener el 100% va a tardar, porque hay lugares muy alejados y de difícil acceso, desde los que demora unos tres días la entrega de las actas. A eso hay que agregarle lo que se tarda en llegar la información de los peruanos residentes en otras” naciones.
Costos asociados. En cuanto a la experiencia previa del voto digital, tanto en la región como en otras partes del mundo, Vilgre La Madrid relata que para Indra “ha sido exitosa en todos los casos”, y que “hemos implementado procesos en Argentina desde 2003, también en Inglaterra, Francia y Eslovaquia. Además, hemos hecho pruebas en España, Portugal, Colombia y Chile, en una consulta popular en la comuna de Las Condes, entre otros”.
Sobre los costos vinculados al sufragio electrónico, Vilgre La Madrid detalla que dependen de la cantidad de elecciones simultáneas que se realizan y el modo de efectuarlos, así como de las medidas de control y seguridad, calidad de las boletas y escrutinios provisorios si los hubiera.
“Los costos están más asociados a la periodicidad de los actos electorales y a la amortización de los equipos. Cuando es manual, se reitera el desembolso por cada proceso, mientras que con voto electrónico se tiene una inversión inicial y un valor notoriamente más bajo en los siguientes”, complementa.
Al hacer una comparación con países de la región, se refiere al caso de Brasil, donde esta modalidad se aplicó “en forma creciente, partiendo por un porcentaje de mesas durante varios comicios, por aproximadamente diez años, hasta llegar al 100%. Y parece ser el camino correcto”, sentencia Vilgre La Madrid.
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