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jueves, 17 de febrero de 2011

La DEA y ‘Matador’

Narcotráfico :::: El sofisticado sistema de ‘chuponeo’ de la agencia antidrogas de EEUU.
WikiLeaks soltó chorro de cables sobre la agencia.
Pobre Rose M. Likins, la nueva embajadora de los Estados Unidos en el Perú.
Esta semana debió visitar a El Comercio para pedirle discreción sobre los WikiLeaks sobre el Perú que el diario ha conseguido misteriosamente en Londres. 
Paco Miró Quesada debe haberle dicho que “claro, cómo no”, y después habrá que ver qué publica. El Paquidermo generalmente es muy cauto cuando confronta complicaciones potencialmente publicitarias. Lo más conflictivo se lo deja a su tabloide subsidiario Perú.21, ya que allí hay pocos anuncios.
Previamente, Likins recibió la visita que le hizo el candidato Alejandro Toledo para pedirle “explicaciones” y cumplir con la coreografía de presunta indignación provocada por CARETAS 2166 y rechazar las alusiones a posibles infiltraciones del narcotráfico en las campañas electorales, todas vigiladas tanto por la Policía Nacional como por la DEA (Drug Enforcement Administration) norteamericana.
La embajadora repitió entonces la inevitable formulación oficial ya conocida:
“(Nosotros) no vamos a abrir investigaciones por razones políticas. No estamos en eso. No es nuestro papel. Nuestro papel es colaborar con las fuerzas profesionales del Perú en cuanto a amenazas específicas”.
El contenido de esa declaración es absolutamente exacto, pero en estos tiempos de WikiLeaks hay renovadas evidencias de que la DEA no necesariamente se abstiene de intervenir subrepticiamente los teléfonos y correos de políticos locales cuando lo considera necesario, y que lo hace aquí y en Cochinchina en el marco de convenios binacionales sobre la lucha contra el tráfico de drogas y el terrorismo adjunto.
Todo esto se volvió a acreditar en diciembre pasado cuando el New York Times soltó un chorro de WikiLeaks sobre la DEA basado en correspondencia cifrada en varias ubicaciones del mundo.
Contiene información como la siguiente:
–La DEA, creada en 1973, es hoy una organización de inteligencia de alcance global con 87 oficinas en 64 países. Su capacidad de intervenir las comunicaciones es de singular magnitud, siendo verdad que diversos gobernantes anfitriones han hecho gestiones para acceder a datos y pepas ‘chuponeados’ por la DEA en sus países con el fin de atacar a sus adversarios.
Los WikiLeaks aluden también a las varias ocasiones en que la DEA se ha resistido a estos requerimientos partidarios.
–Los cables tratan además sobre la necesidad de calibrar la penetración del narcotráfico en las fuerzas políticas que disputan el poder, y de reconocer a los narcos que terminan manejando gobiernos, fuerzas de seguridad y la administración de justicia.
El sofisticado sistema de intervención en las comunicaciones de la DEA se llama ‘Matador’.
–No hay alusión al Perú en estos WikiLeaks pero sí, y extensa, a Panamá. Su actual Presidente, el empresario conservador Ricardo Martinelli, elegido en el 2009, exigió a la DEA que le permitiera utilizar Matador para espiar a sus opositores de izquierda, alegando que planeaban matarlo.
Esa demanda se inició con un mensaje del Blackberry presidencial al embajador norteamericano que decía “necesito ayuda para intervenir (‘tap’) teléfonos”.
Los cables de la DEA sobre Martinelli aseguran que el presidente “no distingue entre objetivos de seguridad y enemigos políticos”, y justifican su negativa a ceder a la reclamación.
Martinelli amenazó entonces con expulsar a la DEA, arguyendo que en Israel podría encontrar asistencia para realizar las tareas de “seguridad” que buscaba.
Los cables informan que en esa coyuntura la DEA trasladó equipos del sistema Matador al local de la Procuraduría General de la Nación, considerándola neutral.
Esto enfureció aún más al gobierno y en el 2010 Martinelli logró inhabilitar y expulsar a la procuradora general Ana Matilde Gómez, quien había sido nombrada por el régimen anterior de Martín Torrijos.
La DEA entonces interrumpió operaciones, pero parte de ese trabajo lo asumió discretamente el MI6 de Gran Bretaña, dicen los WikiLeaks, compartiendo la información.
En Panamá, aparentemente, siguen operando los sastres de John le Carré.
En medio de la disputa, la embajada de EE.UU. en Panamá se llegó a preguntar en mensajes cifrados a Washington si la actitud de Martinelli contra la DEA no estaba destinada a encubrir la corrupción de parientes y amigos.
Un cable alude a la versión de que un primo de Martinelli ayudó durante meses a pasar de contrabando decenas de millones de dólares provenientes del narcotráfico por el aeropuerto internacional de Tocumen.
Así terminó ese entredicho panameño… por el momento.
En México el alto mando militar pidió en privado en el 2010 una colaboración más estrecha con la DEA porque tiene poca fe en sus fuerzas policiales, las que considera infiltradas.
Este tipo de situación se cierne como una pesadilla sobre el Perú si se pierde personal policial clave por razones políticas.
–La DEA opera en Nicaragua y Venezuela a pesar de las tensas relaciones diplomáticas con Washington.
En Venezuela, sin embargo, el servicio de inteligencia chavista se infiltró en sus operaciones, saboteó equipos y se consiguió a un ‘hacker’ que intervino su correspondencia.
–En Paraguay los cables de la embajada describieron una situación en que la DEA se negaba a proporcionar información al gobierno sobre el Ejercito Popular Paraguayo (EPP), organización insurgente que se sospechaba estar enlazada con las FARC de Colombia. El EPP había realizado varios secuestros y estaba haciendo una fortuna con los rescates. El ministro del Interior Rafael Filizzola amenazó con cerrar el sistema de la agencia.
–En esta accidentada trayectoria han muerto en México y Afganistán montones de informantes de la DEA y una media docena de sus agentes.
–Llama la atención, por cierto, que hasta ahora no se hayan revelado WikiLeaks sobre el Perú, que se supone es ahora el primer productor de cocaína en el mundo.
Quizás en la canasta recibida por El Comercio haya algo o quien sabe si aquí no se ha estado ensayando el nuevo cifrado cuántico, que dicen es indescifrable.
En todo caso, Toledo puede estar seguro que la DEA no ha soltado información para perjudicar su campaña electoral ni hay indicios que acate órdenes de Alan García.

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